Antes de introducir por primera vez una prenda dentro del agua, asegúrate que sea lo indicado para ella. Examina su tejido o revisa las etiquetas con las recomendaciones de fábrica que vienen pegadas en su interior. Mediante símbolos universales te indicarán lo que puedes hacer con tu ropa para mantenerla en buenas condiciones por más tiempo.

Si tu prenda no puede ser lavada al agua, recurre a uno de nuestros locales donde te ofrecerán un servicio de lavado en seco profesional.

¿Cómo preparar, las prendas para un lavado?

• Vacía los bolsillos: Asegúrate de que todos los bolsillos estén vacios y luego dalos vuelta. Cualquier objeto que se encuentre en los bolsillos de una prenda que se vaya a lavar, si no es retirado a tiempo puede romper la misma y echar a perder las máquinas u otras prendas. Ten cuidado con otros objetos que si no son quitados a tiempo pueden ensuciar y manchar otras prendas durante el lavado (ej: chicle, lápiz de tinta, etc.).
• Repara las rasgaduras y las roturas: Los orificios pequeños y las rasgaduras pueden agrandarse en la lavadora, por eso es importante arreglar las prendas descosidas antes de lavarlas.
• Desabrocha botones, sube los cierres eclair y cierres velcro para prevenir que se enganchen y dañen otras prendas durante el lavado.
• Retira cinturones no lavables, cordones, cintas y todos los adornos sueltos que se puedan quitar.
• Separa ropa de color blanco / colores claros y colores oscuros: Si mezclas los colores, los blancos podrían teñirse, ponerse grises o amarillos.

Los tonos fluorescentes como fucsias, verdes flúor, azules eléctricos, pierden color rápidamente. Has una prueba de desteñido antes de mezclarlos con prendas de otros colores (aplica detergente y agua en una toalla blanca y luego frota suavemente un borde inferior de la prenda para controlar su desteñido).

• Si mezclas suciedades extremas, las prendas menos sucias podrían tomar suciedad de la solución del lavado.
• Podrás dar el tratamiento adecuado a cada tipo de prenda si las separas por tipo de tejido. Lava por separado los tejidos abiertos (ej: chalecos) y telas delicadas que pierden pelusas, como toallas y algunos polerones.
• Antes de lavar la ropa, aplica desmanchador o detergente líquido sobre las manchas y zonas con mucha suciedad (ej: cuellos, puños, etc.). En algunos casos te sugerimos restregar un poco la mancha para facilitar su remoción. Levanta los cuellos de las camisas y blusas antes de introducirlos a la lavadora.
• Introduce las prendas delicadas dentro de mallas especiales para lavar (cuida de no dejarlas muy apretadas en su interior). Esta es una buena manera de conservar en buenas condiciones los elásticos y tejidos delicados.
• No agregues el suavizante de ropa directamente sobre las prendas ya que se pueden manchar. Idealmente mézclalo con agua (mitad y mitad) antes de vaciarlo en la carga.

CARGA DE LA LAVADORA

• Carga las prendas según el espacio que ocupen en la lavadora, no según su peso. El tamaño de la carga se determina más por el volumen de la ropa que por su peso.
• Mezcla en una carga prendas grandes con pequeñas a fin de obtener los mejores resultados de lavado.
• Coloca las prendas en la lavadora sin sobrecargar la máquina, ya que no obtendrás un buen resultado de limpieza.
• Ordena las prendas según los siguientes criterios antes de introducirlas a la máquina:

ORDENA POR COLOR
Separa la ropa en cargas de prendas blancas /claras y oscuras.

ORDENA POR TEMPERATURA
Separa en cargas distintas los artículos que se puedan lavar en agua fría, tibia o caliente.

ORDENA POR PRENDAS QUE LIBERAN PELUSAS
No mezcles ropa que libera pelusa con aquella que no lo hace. Las telas que liberan pelusas son los algodones, las toallas, cubrecama de felpa, alfombras y ropa que haya sido blanqueada muchas veces.